1.
Ahora comprendo a mi padre cuando se sentaba en la oscuridad y miraba al infinito.
Ahora comprendo a mi padre cuando se sentaba en la oscuridad y miraba al infinito.
Todos pensaban que era un pobre hombre
un ser pesimista
ensimismado.
Quizá se sentía un galán francés
o un humorista italiano
quién sabe lo que había en su interior
un universo
como el de todos
seguro que mejor
porque era el de mi padre.
Ahora que me hago mayor,
le tengo más miedo a los fantasmas.
2.
Las noches sibaritas
Atormentadas
Supermanas
Tormentas eléctricas
Que irradian
Tremendos porrompomperos
Secos
De madre de posguerra.
Las noches con sombrero
Emparejadas
Con estas vidas que no conozco
Y que desaparecen cuando llega la mañana
Seres que viajan
Y que nunca están
En realidad
Nunca estuvieron
Siempre sospeché
Que eran producto
De mis ensueños.
Las noches termita
Ñiqui ñiqui ñiqui
Royendo agujeros
En el panel de al lado
Esperando que el cuerpo
Falle
En algún momento
Asustado ante la implacable deriva
Del tiempo
Lejos de la muerte
De los otros
Más que presente
Se hace la vida
Con vuestra ausencia.
Las noches sibaritas
Extranjeros con guitarra
Fumando yerba
En pisos del centro
Cuando la única burbuja
Permitida la provocaba
Los libros de Cortázar.
Ahora los conserjes se van de vacaciones
Mientras yo simplemente
Trabajo.
Apago la televisión
Dejo de leer un periódico
Ya no escucho la radio
Me siento en la cocina
De madrugada
Y bebo a sorbos una infusión de tila mentolada.
Y cuando paseo por las mañanas por esos campos de secano
Busco ermitas donde sentarme tranquilo
No conozco a nadie
Podría quedarme aquí quieto
Durante siglos
Y verían un árbol.
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