El frío es un idioma desconocido. Caen pájaros congelados. Los aplausos agrietados salen de manos resquebrajadas. Hoy no importa lo que tú esperas vive el azar en otros dedos. Mañana se perderán las promesas Se olvidará el pasado. Los hijos crecen y no te adaptarás a la nueva sorpresa. El frío en la isla del centro entre abetos y espuma fétida nubes grises de Diciembre fantasmas en la carretera. Morirán tus padres tirarán los tabiques de tu casa las calles tendrán otros nombres se deshacerán en polvo tus lágrimas. El frío es un espectro abisal que te mira fijamente a los ojos. Buscas setas bajo los árboles te aferras al cariño de sus troncos. La locura es un consuelo para los lánguidos pero tu corazón sereno quema la escarcha. Una mano saldrá del suelo y te palpará el rostro. El tiempo te proporcionará el mejor pasaporte. Sólo quiero soñar toda la noche para cederte el paso.